En una comparecencia privada para los medios oficiales del Gobierno de Daniel Ortega, Canal 4 y Radio Ya, la Primera Dama y Secretaria de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo dijo que la “realidad tradicionalista de Nicaragua no puede admitir los matrimonios entre personas del mismo sexo” en clara alusión a la Diversidad Sexual. Sus declaraciones fueron dadas al referirse a los políticos de la oposición nacional, incluidos el Movimiento Renovador Sandinista, que ha tenido algunas posturas a favor de los Derechos Humanos de las personas GLBTTTI en Nicaragua. Esto significa un retroceso en el avance que el movimiento social a favor de la Diversidad Social integrado por varias organizaciones ha logrado en el tema, pues deja entrever que desde el Gobierno Central no apoyarían iniciativas de leyes que reconozcan la existencia legal de personas sexualmente diversas.
Recientemente Nicaragua, salió de la lista de países opresores de los GLBTTTI al promulgar un nuevo Código Penal, mismo que penalizó el aborto terapéutico. En sus palabras, Murillo también se refirió al tema del aborto, que también fue descalificado por la Primera Dama de Nicaragua. En ambos casos, adujo la tradición y el catolicismo arraigado en la cultura nacional.
Las palabras de Murillo divergen con la Constitución Política de Nicaragua al afirmar que el país es una estado laico y sus “justificaciones” para no apoyar la Diversidad Sexual y el Aborto no tienen un sustento social si no una base moral. En el país no existe un estudio publico que afirme que la mayoría de los nicaragüenses no apoyen a la Comunidad GLBTTTI o el aborto, pero si la mayoría de los nacionales son católicos.
Sin el apoyo del Gobierno, Nicaragua podría quedarse nuevamente a la saga de América Latina en el reconocimiento legal de Gays-Lesbinas-Bisexuales-Trangeneros-Intersexo, como ya lo hacen México, Argentina. Brasil, Chile, Uruguay y Argentina.
jueves, 6 de noviembre de 2008
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jueves, 6 de noviembre de 2008
Rosario Murillo no admite la Diversidad Sexual
En una comparecencia privada para los medios oficiales del Gobierno de Daniel Ortega, Canal 4 y Radio Ya, la Primera Dama y Secretaria de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo dijo que la “realidad tradicionalista de Nicaragua no puede admitir los matrimonios entre personas del mismo sexo” en clara alusión a la Diversidad Sexual. Sus declaraciones fueron dadas al referirse a los políticos de la oposición nacional, incluidos el Movimiento Renovador Sandinista, que ha tenido algunas posturas a favor de los Derechos Humanos de las personas GLBTTTI en Nicaragua. Esto significa un retroceso en el avance que el movimiento social a favor de la Diversidad Social integrado por varias organizaciones ha logrado en el tema, pues deja entrever que desde el Gobierno Central no apoyarían iniciativas de leyes que reconozcan la existencia legal de personas sexualmente diversas.
Recientemente Nicaragua, salió de la lista de países opresores de los GLBTTTI al promulgar un nuevo Código Penal, mismo que penalizó el aborto terapéutico. En sus palabras, Murillo también se refirió al tema del aborto, que también fue descalificado por la Primera Dama de Nicaragua. En ambos casos, adujo la tradición y el catolicismo arraigado en la cultura nacional.
Las palabras de Murillo divergen con la Constitución Política de Nicaragua al afirmar que el país es una estado laico y sus “justificaciones” para no apoyar la Diversidad Sexual y el Aborto no tienen un sustento social si no una base moral. En el país no existe un estudio publico que afirme que la mayoría de los nicaragüenses no apoyen a la Comunidad GLBTTTI o el aborto, pero si la mayoría de los nacionales son católicos.
Sin el apoyo del Gobierno, Nicaragua podría quedarse nuevamente a la saga de América Latina en el reconocimiento legal de Gays-Lesbinas-Bisexuales-Trangeneros-Intersexo, como ya lo hacen México, Argentina. Brasil, Chile, Uruguay y Argentina.
Recientemente Nicaragua, salió de la lista de países opresores de los GLBTTTI al promulgar un nuevo Código Penal, mismo que penalizó el aborto terapéutico. En sus palabras, Murillo también se refirió al tema del aborto, que también fue descalificado por la Primera Dama de Nicaragua. En ambos casos, adujo la tradición y el catolicismo arraigado en la cultura nacional.
Las palabras de Murillo divergen con la Constitución Política de Nicaragua al afirmar que el país es una estado laico y sus “justificaciones” para no apoyar la Diversidad Sexual y el Aborto no tienen un sustento social si no una base moral. En el país no existe un estudio publico que afirme que la mayoría de los nicaragüenses no apoyen a la Comunidad GLBTTTI o el aborto, pero si la mayoría de los nacionales son católicos.
Sin el apoyo del Gobierno, Nicaragua podría quedarse nuevamente a la saga de América Latina en el reconocimiento legal de Gays-Lesbinas-Bisexuales-Trangeneros-Intersexo, como ya lo hacen México, Argentina. Brasil, Chile, Uruguay y Argentina.
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